viernes, 11 de noviembre de 2011 in

San Martín

San Martín


Hoy es 11 de Noviembre, hoy es San Martín y hoy, en referencia a la fecha en que la tradición marcaba el inicio del periodo de realización de la matanza, dice el refranero que: “a cada cerdo le llega su San Martín”.

Hoy, esta costumbre aún pervive en algunas pequeñas y medianas localidades de nuestra piel de toro, fundamentalmente castellanas, donde más arraigo tiene esta festividad- este efeméride que constituye una excusa para el solaz y la diversión.

Aprovechando el refrán "A todo cerdo le llega su Sanmartín", La Medusa  desea aportar, para que no queden en el olvido, algunas coplas populares que suelen convertir esos días tristes, oscuros y fríos del otoño-invierno en los días alegres de la matanza del cuto, cocho, marrano, cochino, lechón, puerco o tocino, nombres, todos ellos, con los que se conoce al socorrido cerdo.

Todos estamos contentos y felices y por lo tanto todos nos ponemos a cantar lo que se cantaba o recitaba en los días de moraga, matanza o matazón. 
Ahí tienen la primera:

Tres noches hay en el año
que te llenan bien la panza:
Nochebuena, Nochevieja
y el día de la matanza".
Y también:

Cuando más goza un baturro,
es cuando mata el tocino,
la noche que va de ronda,
y el día que vende el vino.

Descuartizado el cerdo y protegidos por sacos de malla, para evitar que les cague la mosca, sus deliciosos perniles el personal seguía cantando:

"Tengo guardados dos perniles,
y güen vino en la bodega;
ya pueden venir cuando gusten,
el sarampión y el colera".

Dentro de la fiesta no todo era templanza también había y hay discrepancia:

"Por San Simón y San Judas,
mata los puercos y tapa las cubas"

"El que mata por Todos Santos,
en invierno come cantos"

"El que mata tocino temprano,
pasa buen invierno y mal verano"
Coincidencia:

"Tres días hay en el año
que relucen más que el sol:
matapuerco, sacacubo,
y día del conservón.

"El tocino y el vino,
añejo; el amigo, viejo"
 
"Pan, jamón, y vino añejo,
son los que hinchan el pellejo"
Y consejo:

"San Antón de enero,
mitá pajar, mitá granero,
y la buena gobernadora
el cochíno entero"
Todos colaboraban, allí estaba la familia, la concurrencia o casi todo el pueblo para colaborar y, para comer, era un día de excesos:

"Con la ayuda del vecino,
mató mi abuela un cochino"

Y era también el momento de obsequiar a vecinos y amistades llevándoles "el presente" o “el plato”: una morcilla, un trozo de hígado, una longaniza, un trozo de papada, y algún otro detalle marrano.
Ya lo decía la copla:

"San Antón tiene un lechón,
y no lo quiere matar,
por los muchos presentes
que tiene que regalar"

La matanza del cerdo, ¡ay la matanza! comenzaba en estas fechas, días de ritual primitivo y rusticano regocijo con fiesta, vino y ritual y si lo desean hasta con vapores de la orgía. La Medusa como buena castellana disfrutaba mucho, qué le vamos hacer, ella es así.


Fotografías y texto del archivo de La Medusa Paca. Copyright ©

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